Historia de los spas

Historia de los spas

Sin duda, una de las prácticas que se llevan haciendo durante muchos años y que en la actualidad está en plena tendencia, es ir al spa. Cuidarse se ha vuelto una moda necesaria que todos tenemos que implantar en nuestra rutina diaria, es fundamental que todos sepamos sobre esta actividad los beneficios que tienen en nuestro cuerpo para conocer todo lo que puede hacer por nosotros. Por eso, hoy queremos hablarte sobre la historia del spa, para que conozcas un poco más acerca de esta revitalizante actividad que nos llena de energía y nos aporta múltiples de beneficios.

¿Qué es el spa exactamente?

Antes de todo, cabe aclarar lo que es el spa por si te falta esta información. Pues, llamamos spa a un centro de relajación que enfoca todos sus tratamientos en el agua. Este es uno de los motivos por los que en la actualidad se ha vuelto como parte esencial en todo cuidado de belleza, pero… ¿De dónde surgió el spa? Te lo contamos todo.

El origen del spa

Vamos a comenzar explicándote sobre su término, pues Spa proviene del acrónimo de la frase en latín Salus per Aquam, esto quiere decir que consigues la salud a través del agua o por medio de este elemento natural. Pero hay otros estudiosos, que dicen que la palabra Spa puede venir de Spagere que quiere decir humedecer. Por lo que, ir a un spa significa ir a un lugar en el que te ofrecen terapias donde el principal protagonista es el agua y la naturaleza.

¿Qué hay de la línea del tiempo del spa?

Son muchas las civilizaciones que ha vivido el spa para llegar hasta donde está hoy, te contamos cada etapa:

  1. Los romanos, estos fueron los primeros en utilizar el agua como principal medio terapéutico, pues todo lo curaban con agua y confiaban en su poder de sanación. Eran los soldados quienes acudían a los baños termales para recargarse las pilas y conseguir todas las propiedades relajantes y curativas. Así, de esta manera conseguían sanar las heridas de las batallas a las que se enfrentaban día a día.
  2. Los egipcios. Por otra parte, como no podía ser de otra manera, los egipcios como los fenicios, hebreos e israelitas, todos ellos recurrían a las propiedades del agua para nutrir y purificar su cuerpo. Pero esto no quedaba aquí, puesto que también de manera espiritual y ritual, sanaban y limpiaban su alma.
  3. El primer médico de la historia se llama Hipócrates, es el que analizó los efectos del agua fría y caliente, del mismo modo que recomendó el agua termal para fines terapéuticos. Aquí comenzó a dar mucha más popularidad al agua y a su energía.
  4. Los griegos formaron parte de la evolución del spa, pues ellos fueron quienes crearon el spa, en épocas antiguas, los lugares de entrenamiento contaban con baños para ducharse, así como usaron barros después del entrenamiento o también utilizaban aceites, por lo que también hacían masajistas. Fueron los primeros que impulsaron la creación de estos centros como los conocemos en la actualidad.
  5. No fue hasta el año 1910 que llevó a crear los spas modernos. Pero, en estos momentos se ofrecía el spa con servicios faciales, manicura y otros servicios estéticos. En este caso, podemos ver como en la actualidad hay lugares en los que se sigue haciendo el servicio completo o en otros en los que solo encontraremos el spa.

Como has podido ver, los spas han viajado mucho en el tiempo hasta llegar a lo que son hoy. Lo que no cabe duda es en la creencia y la importancia del agua en todo tratamiento para poder sanar nuestro cuerpo tanto por dentro como por fuera.

¿Qué beneficios conseguimos con el spa?

Son muchas las ventajas que nuestro cuerpo consigue a través del spa. Vamos a detallarte algunos de ellos para que pongas en marcha esta actividad por lo menos una vez al mes para mantenerte vivo y sano:

  1. Una de las cosas más importantes en el día de hoy que nos afecta a todos es el estrés. Sin duda el estrés es una consecuencia del tipo de vida que llevamos y el motivo de muchas enfermedades que se derivan de ella, por eso el spa te ayudará a desconectar por completo de nuestras vidas y a liberar el estrés, así como la tensión que cargamos en nuestro cuerpo en el día a día.
  2. Con el Spa aumentaremos la circulación sanguínea, muy importante para nuestro cuerpo. De esta manera, aumentaremos el flujo de nutrientes y el oxígeno en todo el sistema hacia las células del cuerpo. Por eso conseguimos una sensación de bienestar y nos permite sentirnos mucho mejor.
  3. Estimula el sistema linfático, esto es porque cuando te das un masaje, el sistema linfático se estimula y permite que el cuerpo elimine de manera mucho más efectiva todas las toxinas que causan lentitud en el cuerpo. Por lo que, con ello, conseguimos una mayor energía y liberar Serotonina que es la que ayuda a sentirte bien.
  4. Exfolia la piel y alivia el dolor en todos los tratamientos que puedas hacerte en el spa. Porque consigues una relajación física y mental que en otro tipo de actividades no vas a conseguir. Si tienes contracturas o si tienes problemas cervicales, tu mayor aliado en todo momento va a ser acudir al spa.

Como has podido comprobar, es esencial que de vez en cuando te puedas escapar a dotarte de todos los beneficios que nos da el spa. Tanto por dentro como por fuera notarás desde el primer momento una mejoría inigualable. Si nunca has ido a un spa te animamos a que cojas tu cita cuanto antes, además, si le coges el gusto no olvides que puedes instalarte un jacuzzi en tu propia casa. Puedes llamarnos o consultarnos lo que necesites y te ayudaremos en todo lo que quieras. Nuestro equipo profesional estará encantado de poder asesorarte en todas tus preguntas.

Publicaciones Similares